Basada en el misterio de Sunny von Bulow y su marido Claus von Bulow, la película narra el proceso judicial emprendido por el profesor de leyes y abogado, Alan Dertzshowitz (Ron Silver), quien es contratado por el millonario ejecutivo de la industria petrolífera y aristócrata de la alta sociedad neoyorquina, Claus von Bülow (Jeremy Irons), para liderar el proceso de apelación sobre el caso de Sunny von Bolow (Glenn Close), la multimillonaria heredera de la fortuna del magnate George Crawford, que ha caído en un estado de coma, bajo circunstancias sospechosas, siendo Claus von Bülow acusado de haber inducido dicho coma, mediante el uso de insulina, para lograr quitarle la vida a su esposa, y así heredar su vasta fortuna.
A partir de entonces, se inicia un proceso de reconstrucción de los hechos, que incluyen las teorías de los numerosos involucrados en el proceso de apelación, como también la versión del propio Claus von Bülow, descubriéndose el entorno lleno de intrigas, traiciones, infidelidades y roces existentes dentro de la familia von Bülow, que se vuelven claves para materializar la defensa legal del controvertido personaje.
Alan Dershowitz, reune una suerte de comuna constituida por diferentes abogados, estudiantes de leyes y expertos, para armar el caso, logrando obtener la capacidad de rebatir las pruebas circunstanciales que fueron usadas en el anterior juicio de von Bülow, en el cual el fallo había resultado en su contra. Al impugnar la veracidad de las pruebas médicas y presentar una nueva teoría de los hechos, Alan logra inducir el concepto de «Duda Razonable», con la cual el tribunal de apelaciones, no tiene más remedio que fallar en favor de la inocencia de Claus von Bülow y pagarle en contrarrembolso la fianza de 1 millón de dólares que previamente von Bülow había tenido que cancelar, además de ratificar, en consecuencia, su capacidad de mantener sus reclamaciones sobre la fortuna de Sunny von Bulow. No obstante, Alan al terminar el caso, le deja en claro a Claus que nunca creyó en su inocencia al afirmar:
"Legalmente esto es una victoria, pero moralmente usted está solo".
Con tal afirmación, se pasa a la icónica escena final, donde Claus va a una farmacia y es reconocido por la vendedora, entonces él compra un medicamento corriente, pero luego pide una dosis de insulina, con lo cual, a la mujer se le hiela la sangre, sólo para luego, detectar una sonrisa complaciente en el rostro de von Bülow, y un simple «"estoy bromeando"».
Con esto, la pregunta de si Claus von Bülow fue responsable o no de inducir el coma a su esposa, queda al aire, a merced y criterio del espectador.
Conclusión:
Yo pienso que el Vo Bulow tiene derecho a la defensa y a demostrar su inocencia ya que todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario.
La justicia para mi fue el valor mas importante.
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